Todos sabemos que nuestra parroquia es nuevecita, pero no por ello deja de tener una historia. Es importante que la vayamos conociendo, para que la sintamos como más nuestra, más de todos.
Hace años ya que Majadahonda va creciendo como ciudad, un lugar en el que casi nadie es de aquí pero donde todos vivimos muy a gusto. Precisamente porque se prevé que siga creciendo, desde el Arzobispado de Madrid se comienza a pensar en que según aumente la población las necesidades pastorales también irán creciendo, por lo que se toma la iniciativa de comenzar los trámites para la creación de una nueva parroquia.
Con la colaboración del Ayuntamiento, que autoriza su establecimiento, la empresa Afar 4 cede provisionalmente una parcela de su propiedad para que pueda levantarse el prefabricado que conocemos. D. Santiago Nogaledo es el sacerdote encargado por el Vicario Episcopal para que supervise estas obras. El “barracón” se levantó durante el verano del año 2007 aunque las obras se prolongaron unos meses. Lo cierto es que mucha gente se preguntaba a qué se iba a dedicar, hasta que se colocó una gran cruz de hierro que más o menos daba idea de que “algo cristiano” iba a ser.
Los trámites canónicos para la creación de una parroquia son largos: En primer lugar hace falta que el departamento de sociología vea la necesidad futura y se plantee a los sacerdotes del arciprestazgo la conveniencia o no de que exista una nueva parroquia. Una vez vista la necesidad se hace el estudio sociológico de por dónde sería mejor establecer los límites territoriales de la posible nueva parroquia, lo que se consulta con el arcipreste y los párrocos afectados por la nueva parroquia, es decir, aquellos que pierden parte de su territorio parroquial que formará la nueva. Una vez hecho esto, se presenta el informe al Vicario Episcopal de la zona, que da su visto bueno y lo presenta al Consejo Episcopal y por tanto al obispo. Si éste, como fue nuestro caso, ve oportuna la creación de la parroquia lo presenta al consejo presbiteral que da su visto bueno, tras lo cual el obispo emite el decreto de creación y el nombramiento del nuevo párroco.
Todos estos trámites se han seguido en nuestra parroquia, por lo que en realidad, se hicieron las obras de la instalación provisional del templo, bastante antes de que como tal pudiese ser una parroquia canónicamente erigida.
Después de muchos rumores, y visto que el prefabricado estaba listo, el Vicario Episcopal, D. José Luis Huéscar, decide poner en marcha el funcionamiento del barracón como templo, aunque aún no como parroquia porque los trámites anteriores están a medio camino. Se encarga a D. David Benítez Alonso, hasta ese momento vicario parroquial en la parroquia de Sta. Catalina, de la cual se desmiembra completamente la nueva parroquia, la puesta en funcionamiento del nuevo templo de S. Marcos, que es como en origen se iba a llamar la nueva parroquia. El por qué, se debe a que uno de los cerros próximos lleva ese nombre y en época antigua se llevaba a cabo una romería, por lo que pareció oportuno ese nombre.
D. David se hace cargo de la finalización de las obras del prefabricado el 28 de enero de 2008, que es cuando recibe el nombramiento de encargado de la puesta en funcionamiento de la nueva parroquia. En un principio no se pudo hacer mucho ya que los últimos retoques de las obras iban despacio. En ese ínterin el Sr. Cardenal, D. Antonio Mª Rouco Varela decide el cambio de nombre de la nueva parroquia, que aún no existe como tal, y le da el nombre actual: Sta. Genoveva Torres Morales. La razón es que nuestro obispo decide, con muy buen criterio, que en Madrid ya hay varias parroquias con el nombre de San Marcos, lo cual podría dar lugar a confusión, y además, piensa que las nuevas parroquias de la diócesis deben llevar nombres de santos modernos, contemporáneos, que expresen también la juventud de la diócesis que crece en nuevas zonas y que haga ver el ejemplo coetáneo de la vida de estos santos con los feligreses. Este es el caso de Sta. Genoveva, que murió en 1956, como quien dice ayer en la Historia de la Iglesia, pero que fue canonizada por Juan Pablo II en la Pza. de Colón el 4 de mayo de 2003, en su última e inolvidable visita.
Por tanto, D. David –desde mediados de febrero- pasa a ser, a la vez que vicario parroquial en Sta. Catalina, encargado de la puesta en funcionamiento de la nueva parroquia de Sta. Genoveva Torres Morales de Majadahonda. El 14 de marzo de 2008, el consejo presbiteral de la diócesis aprueba, a propuesta del Sr. Cardenal, la creación de la nueva parroquia. D. Antonio Mª Rouco firma el decreto de erección canónica el 31 de marzo de 2008. Unos días después, el 9 de abril, D. David Benítez Alonso es nombrado primer párroco de la nueva parroquia y tomará posesión canónica de la misma el 20 de abril de 2008 en una solemne ceremonia a la que asistieron más de treinta sacerdotes y muchísimo público, incluida la Madre General de las Religiosas Angélicas, tanto que el prefabricado se quedó pequeño y bastantes personas debieron asistir desde la calle a la ceremonia, a pesar del intenso frío y la lluvia ocasional.
Desde ese momento la parroquia ha comenzado sus actividades pastorales de forma completamente independiente y continúa su camino con la ayuda de Dios. Tres meses después de su apertura ya son incontables las personas que se han acercado a esta nueva casa del Señor en Majadahonda y muchas son también las colaboraciones de distinta índole. Mucho queda aún por hacer y esperamos que esta historia que hoy se comienza a narrar tenga muchos hitos en los cuales detenerse con la ayuda de Dios. Con esa intención ha nacido esta parroquia, la de predicar el nombre de Cristo a todos aquellos que quieran escucharlo y de servir a nuestra madre la Iglesia que peregrina hacia Dios. A quien sea dado todo honor y toda gloria.